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La última función del Intocable

  • mauro_vok
  • 3 sept 2020
  • 6 Min. de lectura

El 7 de agosto se cumplieron 44 años de la pelea despedida de Nicolino Locche, el boxeador mendocino que supo conmover con su arte defensiva y que se asentó como uno de los mejores púgiles argentinos de la historia. Desde CDDL repasamos su carrera, peleas, títulos y las mejores proezas del deportista nacido en Tunuyán.


Por: Mauro Velasco


El octavo y frío mes del año calendario no fue ni será el mismo para los amantes del boxeo nacional, y más para aquellos que fueron cómplices, partícipes y testigos de la carrera de Nicolino Locche. Estos vieron y nos relataron una historia totalmente atípica para el boxeo de aquel entonces; un hombre que bailaba y evitaba ser golpeado en el ring, que se preocupaba más por esquivar los puñetazos que por pegar, que poseía escasa definición (apenas 14 victorias por knock out) pero igual ganaba, que en ocasiones disfrutaba más del espectáculo que del combate en sí. Inclusive fue uno de los primeros boxeadores que atrajo público femenino al histórico estadio Luna Park. Su récord se conformó de 136 combates, 117 victorias (14 KO y 103 por decisión), apenas 4 derrotas, 14 empates y una sin decisión.


Nicolino Felipe Locche nació un 2 de septiembre de 1939 en Tunuyan y debuto en el cuadrilátero a los 19 años en la provincia de Mendoza. Foto: Gentileza.

Su estreno, un 11 de diciembre de 1959, fue positivo. Venció por KO al argentino Luis García. Un año mas tarde debutaría en el gran escenario nacional, el aclamado Luna Park, cuando enfrenta y vence por puntos al mexicano Juan Ramírez, siendo este su primer rival internacional. Tres meses mas tarde, Nicolino sufriría su primer derrota: fue ante su compatriota Vicente Derado en la Asociación Mendocina de Boxeo de calle Mitre de Ciudad. Locche cayó por puntos en diez asaltos ante quien fue uno de sus rivales más frecuentados, ya que con Derado combatieron en cinco ocasiones con la mencionada victoria para Derado, un empate, y tres victorias para el tunuyanino.

De aquí en adelante, Nicolino iniciaría una carrera magistral. Desde esa caída en su provincia, el 'intocable' elaboro un récord tremendo gracias a su gran defensa y su habilidad para moverse rápido y fácil dentro del ring, sumado a la técnica para esquivar golpes.


Desde 1959 hasta 1964 peleó en 55 ocasiones y venció en 45, los 10 restantes fueron empates. En este camino ganó el título argentino de peso ligero (año 1961) en el Luna ante Jaime Gine, venció y obtuvo el titulo sudamericano de peso ligero (1963) ante el brasilero Sebastiao Nascimento, y salió por primera vez del país para visitar tierras uruguayas y empatar en diez rounds ante el local Gualberto Gutiérrez en el Estadio Nacional de Montevideo. También se dio el gusto de promover su arte boxística en provincias argentinas como Córdoba, Salta, Tucumán, etc. Y de combatir ante púgiles de otros países cómo Abelardo Sire (Chile), Tony Padrón (Venezuela), y Joe Brown (USA), entre otros. Dicho invicto concluyó ante otro cotidiano rival, el argentino Abel Laudonio, quien poseía la medalla de bronce en la categoría mosca en los Juegos Olímpicos de Roma 1960. Laudonio era un ágil y gran boxeador y fue el segundo en vencer al mendocino, quitándole el título argentino de peso ligero. Ambos se vieron las caras en tres ocasiones y dos fueron para el de Cuyo.


Choque de potencias: Locche y Laudonio por una presea nacional. Fue el segundo enfrentamiento entre ambos. Foto: Gentileza.

Luego de su segunda caída en cinco años, reanudó su posta de campeón y consiguió su segundo y mejor período de victorias, ya que desde 1964 hasta 1972 realizó 57 peleas, ganando 54 y empatando en 3 ocasiones. Números verdaderamente impresionantes, con apenas dos derrotas en trece años. En este lapso enfrentaría nuevamente a Laudonio en lo que fue su último pleito ante el bonaerense y esta vez obtuvo el triunfo ni mas ni menos que en la defensa del título sudamericano de peso ligero, ganando por puntos en doce asaltos. Además, recuperó el cinturón argentino de peso ligero un 18 de diciembre de 1965 ante el argentino Hugo Rambaldi, también por puntos y en doce asaltos.



Luego de recuperar la corona nacional enfrentaría a diferentes y grandes boxeadores. El 12 de diciembre enfrentó y venció a Sandro Lopopolo (Italia), Eddie Perkins (USA), Alfredo Urbina (México ), Abel Cachazzu, Osvaldo Piazza, etc.


Pero lo importante y grande en su carrera fue obtenido en el año 1968, cuando un 12 de diciembre enfrentó y venció al norteamericano Takeshi Fuji (de ascendencia japonesa) en la ciudad de Tokio en el viejo edificio 'Kuramae Kokugikan'. Aquí Nicolino realizó una gran exhibición y obligó al local a retirarse y abandonar por frustración, ya que le fue imposible conectar el rostro de Locche y se encontraba abatido patológicamente y con ambos ojos hinchados, dejando la pelea en el round número diez y otorgando su cinturón y primera defensa del título en manos del argentino que se consagraba como campeón mundial de la AMB (Asociación Mundial de Boxeo) en la categoría súper ligero. Dicha pelea es sumamente recordada en nuestro país dado la trascendencia del argentino y la magnitud del cinturón en disputa. Además, la por entonces emisora porteña LS5 Radio Rivadavia envió a su equipo periodístico (algo atípico para la época debido a la falta de transmisiones satelitales -comenzarían en 1969-) integrado por Osvaldo Caffarelli en relatos, Ernesto Cherquis Bialo en comentarios y a Jorge 'Cacho' Fontana como locutor comercial. Dichos comunicadores cuentan que tal era la tranquilidad y confianza que tenia el argentino, que previo al combate y mientras se desarrollaban las peleas preliminares, Nicolino recibió una cálida sesión de masajes y se quedó dormido. Ninguno de los presentes de su cuerpo técnico lo podía creer. Pese a esto, la victoria fue inminente.

Nicolino y su entrenador, Don 'Paco' Bermúdez, luego del enorme triunfo. Foto: Gentileza.


















Locche ante Fuji, mejores lapsos de la pelea.


La vuelta al país fue una fiesta y el deportista se consagró como el tercer campeón del mundo de nuestro país y segundo en ser mendocino, continuando el legado de Pascual Pérez, quien había obtenido dicho título también en Tokio ante el japonés Yoshio Shirai. A partir de aquí, Locche continuó con su defensa y logró retener el cinturón durante cuatro años y en seis combates. Primero, lo retuvo en su amada Mendoza, en la Asociación Mendocina de Box, donde venció por decisión unánime al mexicano Manuel Hernández, un 3 de abril de 1969. Sus siguiente cinco defensas fueron positivas, con victorias ante Carlos 'Morocho' Hernández (considerado el boxeador venezolano más completo de todos los tiempos), Joao Henrique (Brasil), Adolph Pruitt (USA), el español Domingo Cabrera y el colombiano Antonio Cervantes. Dichas defensas fueron todas efectuadas en el estadio Luna Park. La caída y pérdida del título llegaría un 10 de marzo en Panamá ante el local Alfonso Frazer por puntos, donde Nicolino tuvo una noche para el olvido y perdió sin excusas ante un contrincante superior. Locche pediría posteriormente la revancha en Argentina, revancha que jamás se disputó.


El final de su carrera asomaba pero la derrota ante Frazer le dio una nueva y última oportunidad. Previo a esto, combatió y venció a estupendos púgiles como Benny Huertas (Puerto Rico), Pedro Adigue Jr. (Filipinas) y Gerardo Ferrat (México), entre otros. Su último y deslucido intento por recuperar el título mundial de la AMB fue en 1973 ante el colombiano Antonio Cervantes, conocido como 'Kid Pambelé' en la ciudad de Maracay, Colombia. Dicha pelea es catalogada cómo "la noche que no fue intocable", dado que su rival lo apabulló y le propinó su primera y única derrota por nocaut técnico en el décimo round. Cabe destacar que el pupilo de Bermúdez ya había vencido al colombiano en Argentina, en su sexta defensa del título.


La derrota en Maracay fue la cuarta y última caída del intocable. Una noche para el olvido. Foto: Gentileza.

A partir de ahí, Nicolino disputó sus últimas siete presentaciones y ganó todas. Su retiro fue el 7 de agosto de 1976 a la edad de 36 años ante el chileno Ricardo Molina Ortiz en la ciudad de San Carlos de Bariloche, Río Negro. Previo a esto venció a pupilos cómo Lorenzo Trujillo (USA), Emiliano Villa (Colombia) y Javier Ayala (México), entre otros. Su despedida fue a toda orquesta y proclamó al boxeador como una leyenda del boxeo argentino e internacional.


Cabe destacar la gran presencia nacional e internacional de Locche, con un total de 52 peleas realizadas en su Mendoza natal (última ante Benny Huertas de Puerto Rico el 9 de febrero de 1973), 53 peleas en Bs. As., en escenarios cómo el Luna Park, Mar del Plata, Bahía Blanca, Tandil, y las restantes Córdoba, Salta, San Miguel de Tucumán, Santa Fe, Chaco (Resistencia), Río Gallegos (Santa Cruz) y San Juan. En cuanto al ámbito internacional, visitó países como Uruguay, Japón, Panamá y Colombia.


En 1980, la Fundación Konex le otorgó la primera edición de los premios Konex y el Diploma al Mérito como uno de los mejores cinco boxeadores de la historia. Además, en el año 2003 ingresó al Salón Internacional de la Fama del Boxeo junto al gran George Foreman.


El apodo Intocable se lo puso el periodista Piri García de la revista El Gráfico, en alusión a la por entonces exitosa serie de televisión 'Los Intocables'.


Su última aparición pública fue en 2004 cuando recibió en su domicilio el cinturón original que había ganado en Japón, ya que en Tokio le entregaron una réplica. Foto: Gentileza.

El miércoles 7 de septiembre de 2005, Nicolino muere en Las Heras, Mendoza, a la edad de 66 años producto de una enfisema pulmonar (relacionada especialmente por su relación con el cigarrillo) que le produjo un severo paro cardíaco. Lo que no murió es la leyenda de aquel artesano del deporte, quien definitivamente marcó un antes y un después en la historia del boxeo mundial.



 
 
 

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